[…] El diagnóstico, también, suele convertirse en un muro de silencio. […] cuando hacemos del diagnóstico el tema de la vida de la familia, es prácticamente seguro que la chavala o el chaval que carga con él se sienta profundamente invalidado en su discurso y, lo que es peor, en su deseo. […]
Seguir leyendo «Lo inenarrable del diagnóstico»
[…] Reconozco que respondí de manera provocativa. La pregunta llevaba implícito que las familias tendrían que hacer algunos ajustes significativos, pero, como me gusta tocar un poco las pelotillas, lo dije así: “bueno, lo primero que pasaría es que los profesionales perderíamos nuestro estatus y que no cobraríamos por nuestro trabajo, ¿verdad?” […]
Seguir leyendo «Profesionales que necesitan del sufrimiento psicosocial»
[…] «Cuidado con ella, Gorka», me han dicho, diciéndome indirectamente que se trata de una persona peligrosa, de la que me tengo que proteger. Y, claro, yo, que no soy de piedra, me he cagado un poco encima, porque ¿quién será esta tipa para que me adviertan así? […]
Seguir leyendo «La paranoica»
[…] Lo que viene después, ya te lo imaginas. Un charco de sangre en el suelo, y una cuchilla. Policía, ambulancias, médicos y un ingreso hospitalario prolongado, con interconsulta a psiquiatría. […]
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La mayor parte de las etiquetas diagnósticas tienen un impacto negativo. No lo dudo. Sin embargo, en algunos casos, un cambio en la etiqueta diagnóstica puede abrir puertas.
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Está diagnosticada de #TrastornoLímiteDeLaPersonalidad. Hoy le he escrito un cuento. He pedido a su familia que encuentren “entre líneas” las claves que le pueden ayudar. Yo digo que les ha encantado ¿dónde nos llevará?
