2017 o el fin de mi vida (como hasta ahora la conocía) [diario de embarazo IV]

Esta es la típica entrada de despedida de año, de balance. Pero de alguna manera es un balance vital, porque intuyo que va a ser el final de mi vida tal como la conocía. 2018 va a ser el año en el que sume a la definición de mi misma un nuevo concepto.

Hoy es 30 de diciembre de 2017 (a saber cuándo publicaré esto, teniendo en cuenta que llevamos 4 meses previos sin publicar) (perdón)

Ya sé que lo que esperáis de mi en este momento de la vida son cosas de mi embarazo. Además, se supone que es lo que encaja en un blog sobre educación, aunque no exactamente. Y por supuesto, estoy embarazada, claro. Si no, a ver de qué… Ahora mismo de 17 semanas y 2 días. Parece una condena, en unos meses os digo si lo ha sido.

El caso es que es 30 de diciembre, he dormido un porcentaje muy elevado de las horas de este día, pero en los ratos despierta me ha dado por reflexionar -el típico tópico findeañero, bueno, pues sí-.

También ayuda que ayer por la noche estuve con una buena amiga tomando copazos (mostos) en una terraza hasta altas horas (las 22:30) y hablando sobre fiestas y descontrol (maternidad). Ella tiene una hija de 18 años que acaba de empezar la universidad y yo, tengo un feto precioso. A mí ella me da envidia, porque conozco a su hija y es espectacularmente maja y sobre todo, porque ya ha terminado de criar y lo hizo muy muy bien. Y yo a ella le doy envidia, porque todavía no he empezado a criar y me quedan unos cuantos años de disfrutar y sobrevivir al gran reto de encauzar otra vida. La vida.

Así que no será actualización del embarazo en sí, pero este post si que hablará un poco sobre ser madre. Que ya lo soy un poco. Un 35% más o menos.

Yo hasta ahora soy hija, la pequeña. Super hija, la más hija del mundo. Y me encanta ser la hija y hermana pequeña. Vivo en un mundo genial, en el que mi padre me sigue llamando por mi mote de bebé, mi madre me sigue cocinando todo lo que quiero cada vez que voy a visitarlos y siempre tiene algún regalito. En el que si tengo cualquier clase de problema siempre me salvan. En el que mi hermano mayor se mete conmigo y me llama enana. Todo como siempre. La niña.

Llevo 14 años viviendo fuera de casa, con 18 me fui a la universidad a Madrid sola. Ellos se quedaron en Galicia. 7 años en Madrid estudiando y los siguientes 7, en Bilbao ya con Gorka. Nunca, en todo este tiempo, me he sentido adulta del todo. Para todo he contado con la amorosa custodia de mis padres y posteriormente, también con el amoroso soporte incondicional de Gorka, al que todavía me da como vergüencita adolescente llamar marido.

En todo este tiempo, a pesar de no ser adulta en mi cabeza, si que he fabricado una vida relativamente adulta a mi alrededor. En Bilbao. En Galicia no me da la gana. Y lo que pasa ahora es que estoy embarazada en Bilbao, pero cuando voy a Galicia, quiero seguir siendo la niña y casi me sienta hasta mal que mi madre de repente haya puesto de fondo de pantalla a mi feto y que mi padre haya empezado a bromear con que ahora soy mami. Igual hasta estoy un poco celosa de que mi hija me vaya a destronar. Maldición. ¿Estoy loca?.

Y este es uno de los “síntomas” del embarazo que estoy notando últimamente: me estoy volviendo loca. Quiero pensar que es el efecto maceta. Lo importante es lo que crece dentro.

Y reflexiono sobre como cambia la vida al tener un hijo (y aun no tengo ni idea). Y como voy a cambiar yo. Por una parte no me quedará otra opción que cambiar mi rol. Que a ver, que igual soy un poco dramática con 32 años planteándome que no quiero “adultecer”. Pero yo me entiendo. Y no quiero. Y por otra parte, he decidido muy conscientemente que quiero tener un bebé. Tan consciente que llevo queriéndolo muy fuerte los últimos dos años largos. Pero ahora pienso que 2017 va a ser mi último año de soltera, de hija, de niña, de enana… porque aunque mi 1,55 de estatura me defina como pequeñita, habrá una persona más pequeñita y adorable que me necesite a mí un poco MADRE. Con mayúsculas. Ese nuevo concepto.

MADRE, concepto, añádete de a la lista de lo que soy, pero respeta todo lo demás, porfa, que si no me descalabro.

2017. Te recordaré como un año que a pesar de no haber sido especialmente emocionante en tu primera mitad, serás el último de lo que hasta ahora fui. 2018, paso de hacerte propósitos. Sorpréndeme. Haz que me vuelva a conocer. En una nueva versión.


Mariña Casais

Autor: Mariña Casais. He estudiado comunicación audiovisual y dirección de cine. En la actualidad creo contenido para diversas plataformas, y dirijo la tienda online de materiales educativos hechos a mano Edukiwi, donde hacemos realidad las ideas de este blog ¡contacta conmigo! info@marinhacasais.com

Este artículo pertenece al blog www.educacion-familiar.com, antes www.indartzen.com. Si quieres saber más sobre nosotros echa un vistazo a quiénes somos y síguenos en nuestras redes sociales Facebook y Twitter, somos @educfamilia.

2 comentarios en “2017 o el fin de mi vida (como hasta ahora la conocía) [diario de embarazo IV]

  1. Angy

    Sister, tu siempre serás esa hija, amiga, hermana y madre imperfecta que se encuentra dentro de la perfección. Ya queda menos para abrazar a esa criaturita que tengo tantas ganas de conocer, sin por supuesto, destronarte como lo que eres: una bella persona. te quiero!

    Me gusta

Deja un comentario